9 de agosto de 2010

Merecimiento, pilar de la Toltequidad

Nacimiento de Ketsalkoatl-Tula, Hidalgo

Por: Hilda Landrove

Para comprender el sentido total del concepto de merecimiento tal y como lo concibió y desarrolló la civilización mesoamericana a lo largo de 5000 años de historia, desde los albores de la cultura olmeca y hasta sus signos de superviviencia en el presente, es necesario primero comprender algunas ideas que constituyen su marco de referencia. Al conjunto de producciones culturales, doctrinas y prácticas de esta civilización se le conoce hoy como Toltequidad...

La Toltekayotl* es definida en uno de los primeros diccionarios de lengua nawatl redactados luego de la conquista española -el del padre Molina- como "arte para vivir". La Toltequidad es entonces, más que una suma de las producciones culturales de una civilización, la propuesta de una forma de vida cuyo centro es la trascendencia de la condición humana hasta alcanzar y manifestar su naturaleza divina, o dicho de otro modo, una forma de vida orientada a la divinización de la existencia humana.


Este proceso está representado por Ketsalkoatl o Kukulcán -en lengua maya-, la Serpiente Emplumada. El término Ketsalkoatl se conforma de la conjunción de ketsal, "ave" y koatl, "serpiente". Esta unión sintentiza la mediación entre el estado "terrenal" y el divinizado; entre el estado de los apegos, la identificación con las limitaciones del mundo de los sentidos, el aspecto animal e instintivo de nuestra condición existencial y un estado de conciencia caracterizado por la integración y la vivenciación de la realidad en su fundamento energético. Esta dualidad describe, por tanto, lo que somos y lo que podemos alcanzar. Las raíces que componen el término contienen además una multiplicidad de significados que implican varias dualidades: lo femenimo y lo masculino, lo visible y lo oculto, y aquella que el antropólogo Carlos Castaneda, quien penetró en la herencia tolteca convirtiéndose él mismo en un practicante, describe como la única dualidad verdadera: tonal y nawal. El tonal es la porción del mundo que percibimos a través de los sentidos y el nawal es la totalidad que no alcanzamos a percibir precisamente por la limitación que impone la percepción e interpretación del mundo.

Ketsalkoatl representa entonces el viaje de la conciencia hacia la liberación, entendiéndola como superación de las limitantes humanas, a lo que William Blake se refería como "abrir las puertas de la percepción".** La Serpiente Emplumada es la figura fundamental del universo mítico mesoamericano y es también representación del ser humano que a través de sus obras alcanza la condición divina que su nombre preconiza.

Merecimiento, entonces, es masewalistli, de la raíz masewa: "merecer, obtener una cosa, hacer penitencia", mientras masewal es el "merecido", "aquel que tiene merecimiento". El primer fundamento de este concepto nos llega a través del mito. Según la mitología el mundo ha sido creado cinco veces. La historia de Mesoamérica y toda la historia humana se inscribe dentro de esta quinta creación que da nacimiento a la humanidad. El mito refiere que todo estaba creado y faltaba el ser humano que poblaría el mundo. Ketsalkoatl era el encargado de recuperar en el inframundo los huesos de los anteriores intentos de crear una humanidad para su restauración. Después de varios accidentes, de los cuales el más significativo es la rotura de los huesos en el camino de regreso, les da vida a estos regando con su propia sangre la mezcla que traería a la existencia al ser humano. Por eso los humanos son "merecidos" por el sacrificio de la Serpiente Emplumada: "Así fue, en verdad: por su merecimiento y por su sacrifico (de Ketsalkoatl), él inventó a los hombres y nos hizo seres humanos".***

De esta forma el merecimiento y el sacrificio forman una unidad conceptual. La condición de merecimiento no se alcanza sin sacrificio. Merecido no es cualquiera, es aquel que ha pasado los trabajos y ha realizado el esfuerzo para llegar a obtener la recompensa de trascender. El hombre puede hacerse divino en virtud del sacrificio de sí mismo. Lo que sacrifica es el ego apegado e identificado con los menesteres de la vida mundana, atrapado en la limitación perceptual y los condicionamientos que lo mantienen esclavizado; esto implica sobreponerse a la apatía y el adormecimiento y trabajar para despertar nuestras facultades ocultas.

Se trata de un arduo camino que fue recorrido por Se Akatl Topiltsin, personaje histórico considerado la cuarta manifestación avatárica de la Serpiente Emplumada y que vivió en el siglo IX. Su vida consistió en el reconocimiento de su más crasa humanidad, la toma de conciencia de sus limitaciones y el trabajo por la progresiva purificación hasta alcanzar el estado de moyocoyani, "aquel que se crea a sí mismo". El merecimiento se revela también, a través del ejemplo de Se Akatl Topiltsin, como la creación de valores en la sociedad, pues nadie existe solo y debe demostrar con obras su responsabilidad. Puesto que se trata de divinizarse, el hombre debe convertirse en un creador emulando la cualidad divina que creó el mundo y sus obras deben ser el reflejo de su actitud y capacidad creativas. La Toltequidad nos habla no de una realización que se alcanza en la soledad y el recogimiento, sino en el medio social.

La importancia de la concepción del merecimiento tal y como lo entiende la Toltequidad radica, para nuestra cultura, en la posibilidad de revertir la forma en que entendemos la divinidad y cómo nos relacionamos con ella. En primer lugar, para nosotros la idea de divinidad está asociada con un Dios personal, con un ser que tiene las limitaciones humanas y a la vez una capacidad de control e influencia ilimitada, un Dios reducido a nuestra propio reflejo. Frente a esta imagen, heredada del dios tribal judaico, podemos tener dos posturas: devoción y servidumbre o negación. La devoción a la idea de un Dios castigador o premiador elimina la posibilidad de la libertad y la de trascender la condición ordinaria de conciencia en que vivimos, pues se trata de seguir un grupo de normas sin cuestionarse nada. La negación, por otra parte, elimina consigo cualquier noción de ir más allá de nuestra condición por una razón muy diferente: simplemente no hay nada que ver o a qué aspirar más allá de los muros de la prisión en que vivimos.

Lo que la Toltequidad propone es que la divinidad es un estado de conciencia, y que dicho estado puede ser alcanzado generando merecimiento, no en la oscuridad del retiro sino en la participación activa en la vida social, pues solo en la interrelación con otros humano, podemos encontrar nuestra esencia y nuestro camino.


Notas:
* Los términos del nawatl están en escritura fonética, así que se pronuncian como se leen.
** "If the doors of perception were cleansed everything would appear to man as it is, infinite" (Si se limpiaran las puertas de la percepción todo aparecería al hombre tal como es, infinito). Willian Blake.
*** Wewetlatoli: "Antigua palabra o Palabra de los sabios". Consejos para la vida que fueron recogidos de la tradición oral por varios de los primeros cronistas españoles. Todas las citas son tomadas de la traducciòn de Frank Díaz que se encuentran en el libro Los Mensajeros de la Serpiente Emplumada.


9 comentarios:

  1. he trabajado en la clonacion de vegetales y he hecho ciertas experiencias en modificaciones geneticas. Esto me permitio saber, que a partir de las células muertas del tejido epiteleal o del cálcico esquelético del tallo de cualquier vegetal, es más, solo de una célula de esos tejidos, se puede obtener toda la "información genetica" para "crear" nuevas células vivas (meristemáticas o indiferenciadas) que, al multiplicarse recomponen con vida a todo el ejemplar completo
    ¿Igual que lo que el mito cuenta que hizo ketzaltcoatl con nosotros a partir de los huesos de otros anteriores?

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  2. Hola Mario, gracias por comentar. muy interesante tu observación. Creo que el mito tiene un sentido simbólico esencialmente. La referencia a la creación de la quinta humanidad de los huesos de la cuarta se relaciona con el mitema de la muerte y el renacimiento; implica un salto de orden, un acceso a otro estado, otro ordenamiento del mundo, en este caso, otra humanidad con cualidades nuevas. También implica un recorrido desde las entrañas del inframundo hacia el mundo en que vivimos, en nawatl llamado Tlaltipac "sobre la tierra"; o sea, un recorrido desde el subconciente hacia el mundo de los sentidos; de la no percepción a la percepción del mundo tal y como lo conocemos; esto si hacemos una intepretación psicológica del mito. En cualquier caso tu imagen es muy útil, dice que potencialmente la quinta humanidad se encontraba ya en esos huesos. Es mucho lo que pudiéramos extraer de este mito. En próximos días, intentaré transcribirlo completo para un mejor análisis. saludos

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  3. Hilda
    Desde un punto de vista cientificista occidental, me refiero a la posible interpretación literal del mito. He participado en la "investigación historica del medio físico" donde se implanta hoy la ciudad de Santa Fe. Este estudio nos llevó a tiempos muy viejos (cuando sudamérica, oceania, afirca, india y antartida componían una sola placa)Dado que algunos de los componentes geológicos se explican solo con el rompimiento de placas y, curiosamente, hemos encontrado mitología guaranítica, que relata los acontecimietnos geológicos que pudimos comprobar. No estoy abusando de conjeturas, me refiero a unos pocos datos ¿Accidentalmente? coincidentes

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  4. Continúo...
    Me refiero a Santa Fe Argentina, en cuyo norte se encuentra un lugar llamado por los nativos como "pampa del cielo" Nada explica el nombre, salvo una tormenta de meteoritos que fue parte de los motivos del rompimiento de la placa madre ¿Cómo pudieron los nativos llamar así a ese lugar? Hay toda una mitología sobre "pampa del cielo" (norte de Santa Fe y sur del Chaco)que se relaciona con la verdad científica

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  5. Hola Mario; es posible que muchos mitos tengan una interpretación literal, como parece ser el caso de la investigación en que participas. Pudieras poner algún link sobre el tema, donde se relacione la mitología guaraní con la historia geológica de la zona?

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  6. Lamentablemente, Hilda, todavia no puedo darte ese link. Te explico: esta investigacion nacio de la escuela de paisajismo de Santa Fe, que continua sin presupuesto oficial, tanto para su funcionamiento pedagógico como para sus actividades de extensión, como los desarrollos para y con la comunidad o las investigaciones. Cuando se oficialice, probablemente a traves de a algunas de las facultades que colaboran, como la de ciencias hídricas o la de antropologia, instalaremos una pagina y se publicara todo.
    Me comprometo para ese momento hacerte llegar el link. De momento puedo recavar algunas partes de ella y mandarlas a un correo particular que me hagas llegar
    Gracias

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  7. mario, puedes escribirme a lluviadearbol@gmail.com
    agradezco de antemano la info, ahí estamos en contacto

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  8. Estos comentarios de Mario Margaritini,"me cambian el metabolismo" de la mucha curiosidad que me causa.

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  9. Excelente ensayo, Hilda. Felicidades. Muy sucinto, concreto e ilumanado.

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